Mirar por la ventana y pensar que ya no te queda nada por lo que luchar, pensar que para ti todo ha acabado, saber que este mundo doloroso nunca será el mismo... y aún así sonreír, sonreír con toda tu alma para que los que te rodea sean felices, para que todos aquellos que te quieren sonrían contigo. Porque sabes que es la única manera de algún día sentirse vivo, sonreír...
Porque una sonrisa no cuesta nada y puede alegrar el día a cualquiera, un solo gesto, una sola mirada, es un segundo que se dedica a mejorar la vida de otra persona... y la propia.
Es un gesto de amor, de amistad, de comprensión, una sola sonrisa dice muchas cosas...
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